[SONIDO] [MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] Si quisiéramos pensar en cuál es el antónimo de corrupción, es decir, qué es lo contrario a corrupción, la palabra que estamos buscando es integridad o íntegro. ¿De donde viene la palabra integridad? Viene del latín ínteger, y quiere decir, entero, algo que no está dañado, que está completo. Aplicado ésto a la administración pública, al servicio público, quiere decir claramente, algo no corrupto. Para poder hablar de integridad en el servicio público, se requiere que el servidor sea capaz de distinguir, lo que está bien y lo que está mal. Que sea capaz de actuar de forma coherente con respecto a los valores del servicio público. Que pueda anteponer el bien común y la legalidad a sus intereses. Que pueda declarar abiertamente que está actuando en forma coherente con lo que se entiende como lo correcto. Cuando hablamos de integridad, queremos decir que una persona o los funcionarios públicos en conjunto, tienen perfecta claridad con respecto a los valores conforme a los que tienen que actuar y los valores en el servicio público son, aquéllos que nos llevan a combatir o prevenir la corrupción. Rendición de cuentas. Transparencia. Imparcialidad. Actuar con justicia. Provocar la conciencia pública, en lo que hacemos. Evitar el daño a la comunidad. Trabajar con eficiencia y ser eficaces en todo aquello que hacemos, es decir, un servidor público que trabaja conforme a estos valores, será una persona íntegra. Una comunidad que trabaja con los límites de la ética y de la legalidad, no será corrupta, prevendrá la corrupción y cuando surge algo de corrupción, se corrige gracias a que gana la integridad por encima de la corrupción. [MÚSICA] [MÚSICA]