Hola de nuevo. En este video y en el siguiente, vamos a profundizar sobre la comprensión de nuestra memoria. Como probablemente estés empezando a comprender, la memoria es sólo una parte del aprendizaje y del desarrollo de la experiencia, pero a menudo es una parte muy, muy importante. Imagino que ya te estás dando cuenta que el aprendizaje consiste no solo en meter cosas dentro de tu cerebro. Es igualmente importante saber cuándo y cómo sacarlas. Por cierto, no dejes que la gente te haga creer que como hoy podemos encontrar todo en Internet, no hace falta memorizar. Dime cómo te sentirías si el cirujano que va a operar un ser querido siguió esa regla durante la universidad, mientras que estudiaba medicina, ¿confiarías en esa persona? ¿Confiarías en alguien que no sabe de memoria todas las posibles anomalías de un páncreas, si es que es eso lo que está operando, antes de meterse en el quirófano?. Yo no. La memoria es una parte fundamental del aprendizaje y sin ella no podemos aprender. Si crees que tu memoria no es uno de tus puntos fuertes, no te preocupes, puedes seguir aprendiendo sin problema. Mira bien estos vídeos que siguen. Te sorprenderá saber que contamos con excelentes sistemas de memoria visual y espacial que pueden ayudar a formar parte de nuestra memoria de largo plazo. Si te pidieran que, por ejemplo, echaras un vistazo a una casa en la que nunca has estado antes. Pronto tendrías una muy buena idea de la distribución general de las habitaciones en la casa, de los muebles dentro de esas habitaciones, sería fácil para ti recordar semanas y días más tarde cuál es esa distribución de la casa y qué era lo que había en cada una de esas habitaciones. Es, probablemente, mucho más fácil para ti recordar eso que si te hubieras pasado todo ese tiempo viendo una pared en blanco. Tu mente está, por lo tanto, hecha para retener todo tipo de información general sobre lugares. Puedes mejorar enormemente tu capacidad de recordar si aprovechas esas capacidades naturales de memorización visual y espacial, especialmente las cosas de gran tamaño. Resulta que nuestros antepasados nunca necesitaron una memoria amplia para recordar números y nombres, pero sí tenían que saber regresar a casa después de días de caza, sí tenían que recordar el sitio donde estaban aquellos dulces arándanos en las laderas rocosas hacia el sur del campamento. Estas necesidades evolutivas ayudaron a fijar un sistema de memoria espacial superior sobre el dónde están y cómo se ven las cosas. Para empezar a aprovechar ese sistema de memoria visual, intenta crear una imagen visual muy memorable que represente un elemento clave que quieras recordar. Por ejemplo, aquí hay una imagen que puedes usar para recordar la segunda ley de Newton, "f" igual a "m a". Se trata de una relación fundamental que vincula la fuerza con la masa y la aceleración. Y sólo nos tomó, a los seres humanos, un par de cientos de miles de años llegar a descubrirlo. Bueno, pues si quieres memorizarla piensa en la letra "f" de la fórmula, como por ejemplo, un forzudo, "m" podría ser una mula. Y bueno, la "a" te la voy a dejar a ti, ¿te parece que pensemos en un ascensor?. ¿Te imaginas al forzudo con la mula dentro de un ascensor? Bueno, yo creo que de ahora en adelante esa ley de Newton se te va a quedar en la memoria. Parte de la razón por la que una imagen es tan importante para la memoria, es que las imágenes se conectan directamente a los centros visuales y espaciales del cerebro derecho. La imagen te ayuda a encapsular un concepto aparentemente monótono y difícil de recordar al utilizar las áreas visuales con capacidades de memoria mejoradas. Cuantos más ganchos neuronales puedas construir evocando los sentidos, más fácil te resultará recordar un concepto. Más allá de ver a la mula, también puedes olerla. Cuanto más divertidas y evocadoras sean esas imágenes, mucho mejor, mejor las memorizarás. Centrar tu atención trae algo a la memoria de trabajo temporal. Pero, para que ese algo pase a la memoria de largo plazo, hace falta que se den dos cosas. La primera, como estamos diciendo, que la idea sea memorable, que tu mula sea gigantesca, que rebuzne y que vuela. La segunda, debes repetirla. De lo contrario, recuerda que esos diminutos vampiros metabólicos pueden eliminar el patrón neuronal relacionado con ese concepto, antes de que esos patrones se fortalezcan y se solidifiquen. La repetición es, por lo tanto, importante. Incluso cuando haces algo memorable, la repetición ayuda a que ese elemento quede firmemente alojado en la memoria de largo plazo. Recuerda repetirlo de manera regular, no un montón de veces en un solo día. Es preferible que lo hagas esporádicamente durante varios días. Con frecuencia, las fichas pueden ser útiles, escribir y decir lo que estás tratando de aprender puede mejorar la repetición. Por ejemplo, si estás tratando de aprender conceptos de física, puedes tomar una ficha y escribir, por ejemplo, la letra "rho". Esa es una abreviatura común de densidad, escríbela por un lado. Y pon el resto de la información en el otro. La escritura, a mano, te ayuda a codificar más profundamente esa red, esa red neuronal. Mientras escribes los kilogramos por metro cúbico, puedes también imaginarte un oscuro kilo y sentirlo encima de tu cuerpo. Cuanto más puedas convertir lo que estás tratando de recordar en algo memorable que evoca tus sentidos, más fácil te será recordarlo. Es útil decir la palabra y su significado en voz alta para establecer ganchos auditivos de lo que estás tratando de aprender. Luego, solo tienes que mirar el lado de la tarjeta y tratar de recordar lo que estaba del otro lado. Si no puedes, dale la vuelta, míralo y vuelve a repetirlo. Es bueno que, también, crees muchas tarjetas, las cambies de orden y que intentes ponerte a prueba tú mismo. Una vez que tengas varias tarjetas juntas, intenta recordarlas incluso antes de dormir. Esto ayudará a utilizar tu sueño para mejorar tu memoria. Espera y vuélvelas a sacar al día siguiente y vuelve a repasar. Este, por ejemplo, es mi bloque de tarjetas de Python de programación. Poco a poco voy consiguiendo aprender mis fórmulas y este nuevo lenguaje. Es importante que sigas esa repetición gradual del material y, así, se vaya asentando lentamente en tu mente. Al aumentar el espaciado, conforme vas sintiéndote mucho más seguro con el material, verás que tu memoria te será cada vez más útil y trabajará contigo y traerá esos conceptos en el momento en que los necesitas. Recuerda que no es sólo un tema de meter, sino el aprendizaje consiste eminentemente en sacar en los momentos relevantes. Soy Teresa Martín-Retortillo. Gracias por aprender a aprender.