Vamos a seguir profundizando en la memoria. Otra clave para la memorización es crear grupos significativos que simplifiquen el material. Por ejemplo, asociar los meses con 31 días a los nudillos de la mano. Enero, febrero, marzo, abril, mayo. Es mucho más fácil recordar números asociándolos con eventos memorables y que tengan significado para uno mismo. 1965 podría ser el año en que nació uno de tus familiares o puedes asociar números con cosas en las que estés familiarizado. Por ejemplo, 11 segundos es un buen tiempo para una carrera de 100 metros o el número 65 puede ser el número de personas que hay en tu clase. Muchas disciplinas usan frases memorables para ayudar a los estudiantes a recordar conceptos. La primera letra de cada palabra de la oración es también la primera letra de una nueva lista que recordar. Por ejemplo, la palabra "CHON" te puede ayudar para recordar los elementos químicos esenciales para la existencia de la vida. El carbono, el hidrógeno, el oxígeno y el nitrógeno, "CHON". Cuando tengas que aprender una larga lista de algo habitual, mira a ver en Internet. Es posible que alguien haya ya desarrollado una palabra o truco memorístico. La técnica del "Palacio de memoria" es una forma particularmente poderosa de agrupar cosas que quieras recordar. De nuevo, se trata de utilizar tu memoria espacial, y utilizando, para ello, un lugar familiar. Por ejemplo, coge el diseño de tu casa y úsalo como una especie de anotador visual sobre el que vas a ir metiendo nuevos conceptos que estás tratando de recordar. Lo único que tienes que hacer es recordar el lugar con el que estás familiarizado, que bien puede ser tu casa, pero bueno, también puede ser el camino al trabajo, un restaurante favorito, el sitio en el que creciste. Es importante utilizar este palacio de memoria con algo de imaginación. Por ejemplo, si te puede ser útil para recordar cosas no relacionadas, te voy a poner un ejemplo, la lista de la compra: leche, pan y huevos. Para usar la técnica de la memoria de Palacio, te puedes imaginar una botella gigante en la entrada de la puerta de tu casa, puedes imaginarte el pan en el sofá y un huevo roto goteando desde la mesa de comer. En otras palabras, te imaginarías caminando por un lugar que conoces perfectamente bien, junto con imágenes que te sorprenden y que hacen evocar la memoria de aquellas cosas que estás tratando de recordar. Si estudias finanzas, sociología y química, lo que sea, seguro que tienes listas que recordar. Recuerda usar este enfoque. Estoy segura que la primera vez que lo utilices, te será algo lento. Lleva un poco de tiempo crear una imagen mental sólida. Pero cuando más lo hagas, ese proceso será tanto más ágil. Un estudio demostró que una persona que utilizaba la técnica del Palacio de Memoria podía recordar hasta el 95 por ciento de una lista de 50 artículos después de sólo uno o dos paseos mentales en los que esos artículos se colocaban, en este caso, en terrenos familiares de la universidad local. Al usar la mente de esta manera, la memorización puede convertirse en un ejercicio extraordinario de creatividad, al mismo tiempo que va construyendo esos ganchos neuronales que te permitirán fortalecer tu memoria. Los puristas podrían decir que usar trucos de memorización extraños no es realmente aprender, pero lo que los estudiosos han demostrado, es que estudiantes que usan ese tipo de trucos superan a los que no lo hacen. Además, la investigación de imágenes sobre cómo las personas se convierten en expertas muestra que estas herramientas de memoria aceleran la adquisición de fragmentos y de plantillas de un panorama general, ayudando a transformar a los novatos en semiexpertos de manera mucho más rápida. Los trucos mnemotécnicos permiten a las personas ampliar su memoria de trabajo con un fácil acceso a la memoria a largo plazo. Además, el proceso de la memoria se convierte en un ejercicio de creatividad. Cuanto más memorices usando estas técnicas innovadoras, más creativo te volverás. Esto se debe a que, cuando estás imaginando posibilidades alocadas y sorprendentes, vas creando futuras conexiones desde el principio y puedes estar internalizando ideas por primera vez. Cuando las practiques, será mucho más fácil recordarlas. Si bien es verdad que la primera vez que das rienda suelta a tu imaginación, puede que te tome diez,15 minutos, construir una imagen evocadora y poderosa. Pero en cuanto le cojas, como todo, el hábito de hacerlo será mucho más fácil. También te darás cuenta de que a medida que empiezas a internalizar aspectos claves del material tomándote un poco de tiempo para memorizar los puntos más importantes, llegas a entenderlo mucho más profundamente. Las fórmulas serán mucho más significativas para ti de lo que serían si simplemente las buscas en un libro y podrás utilizar esas fórmulas de forma mucho más eficaz en exámenes o en el mundo real. Puedes pensar "bueno, no soy tan creativo, es difícil que una ecuación o una teoría se me ocurra con asociaciones de imágenes sorprendentes". Pero no seas tan quisquilloso ni tan duro contigo mismo, recuerda siempre que tu creatividad infantil está ahí, está dentro de ti, solo tienes que buscarla. Soy Teresa Martín Retortillo. Gracias por aprender a aprender.