Posiblemente la capacidad de aprender es nuestra facultad más importante, pues gracias a ella podemos desempeñarnos en toda clase de contextos, circunstancias, medios y estímulos. Si tomamos eso en cuenta, comprenderemos por qué se les exige a los modelos educativos que generen enfoques, no sólo para la transmisión de conocimientos, sino también para la formación de habilidades. Atendiendo eso, ofreceremos algunas definiciones relacionadas con el aprendizaje y una descripción de las condiciones necesarias para aprender. Esta información, se complementa con una reflexión sobre las características de los ambientes de aprendizaje en el entorno digital. Nos interesa darte un panorama preciso sobre lo que es el aprendizaje, ya que será útil cuando integres un proyecto que requiera no sólo de tus conocimientos, sino en especial de tus puntos de vista sobre la educación como un medio para mejorar. El aprendizaje, es la adquisición de conocimientos y habilidades, que permiten un proceso de cambio en el comportamiento. Ese cambio es generado por una experiencia que modifica nuestra conducta o capacidad para desenvolvernos, lo cual sucede gracias a la aplicación del conocimiento o habilidades adquiridos. Visto así, el aprendizaje, sucede cuando hay una asociación entre el estímulo recibido y nuestra respuesta. Por supuesto, eso puede tener variantes. Por ejemplo, en la antigüedad se aprendía de manera espontánea, pero con el paso del tiempo se debió estructurar el conocimiento para que respondiera a cuestiones más complejas. Así fue como se organizaron los conocimientos en ciencias y disciplinas. Todo esto ha sido posible por medio del siguiente proceso: Motivación por aprender. Interés para acceder a la información. Atención a los datos ofrecidos. Adquisición de la información, por medio del aprendizaje. Comprensión de la información, por medio del análisis. Asimilación de la información, a través de la reflexión. Aplicación de la información, en nuestro desempeño. Transferencia de la información a nuestra vida. Evaluación de los conocimientos generados, por medio de la reflexión. El aprendizaje se desarrolla en contextos conocidos como ambientes de aprendizaje, los cuales, implican la organización de un espacio, la disposición de recursos didácticos, el manejo del tiempo, el fomento de las relaciones y la organización y comportamiento por parte de quienes diseñan, imparten y reciben las acciones educativas. Esto tiene características particulares en ambientes digitales, en ellos el principal factor lo representan las tecnologías de la Información y la comunicación, las cuales al romper las barreras espacio temporales y facilitar la comunicación, permiten que un buen ambiente de aprendizaje para entornos digitales, cuente con estos elementos: Uno, espacio con el diseño general del curso y sus componentes fundamentales, objetivos, metodología, temáticas, evaluación, referencias. Dos, espacio con materiales didácticos o instancias de mediación, necesarias para un buen desempeño, textos, imágenes, vídeos, audios, animaciones, simulaciones, uso de software, hipertextos, hipermedios, glosarios, etcétera. Tres, actividades de ejercicio, comunicación y aplicación del conocimiento, tales como foros, blogs, tareas, cuestionarios, etcétera. Cuatro, ejemplos y aplicaciones de los conceptos estudiados. Cinco, recursos de evaluación y auto evaluación. Las ventajas que propone un ambiente de aprendizaje digital, son muchas, pero citamos las más significativas. Uno, se favorece el acceso a la información y a la comunicación. Dos, el participante orienta su acción educativa al definir qué, dónde y con quiénes se puede o es necesario aprender. Tres, las estrategias y herramientas de aprendizaje, se amplían para beneficio de los participantes y de los formadores facilitadores. Cuatro, se puede aprender con la tecnología y también de la tecnología. Cinco, se mejoran algunas habilidades cognitivas que dependen del estímulo que genera cada herramienta. Para mejorar las acciones educativas, se debe privilegiar la forma en la cual aprenden los participantes y cómo aplican lo aprendido. Pues, si las actividades de aprendizaje no están vinculadas con la realidad, no se podrá transferir lo aprendido al contexto cotidiano. Por lo anterior, la educación debe centrar su atención en el aprendizaje activo, si pretende formar personas con capacidades para trascender en la vida.