Ya vimos qué hacer antes de empezar la tarea cognitiva, ya vimos qué hacer durante la tarea cognitiva y, todo eso lo hacemos con base en lo que hacemos después de la tarea cognitiva, que viene siendo el diagnóstico, porque eso nos permite saber qué recursos, qué estrategias son ideales para esta tarea de aprendizaje o de solución de problemas que estoy enfrentando. Pero déjame decirte que nada de eso sirve si no haces algo muy importante que veremos hoy: la revisión metacognitiva. [MÚSICA] [MÚSICA] Una vez que terminamos de hacer algo, es necesario que nos preguntemos si llegamos a la meta. Es decir, contrastar nuestro desempeño contra el objetivo que nos habíamos establecido y, para ello, obviamente, es super importante tener claro cuál era ese objetivo. Para ver esto de la revisión metacognitiva, vamos a regresar al problema que tenía Lu con la camiseta. En la etapa de revisión metacognitiva, Lu necesita asegurarse de que su respuesta cumpla con todo lo solicitado. A ver, lo que me pedían era que definiera si la etiqueta quedaba adentro o afuera y de qué lado, y dije: Afuera y a la izquierda. ¡Listo! Ya lo resolví. Pero, ¿qué crees? No siempre es fácil saber exacto qué es lo que me piden. Vamos a ver un ejemplo medio enredoso. Juan viajó 3.7 kilómetros al oeste por la carretera a Atotonilco. Pero cuando llevaba cinco minutos de manejar a la máxima velocidad permitida, se dio cuenta de que se le había olvidado el paquete que debía llevarle al alcalde, a una cita que tenía dentro de hora y diez. Entonces pensó: "Si le hablo a Paquito para que me lo traiga en su coche, a lo mejor le da flojera. Pero él está a dos casas de mi casa y sí tiene la llave. Si le digo a Esteban, que siempre es muy cumplidor y que está a 10 cuadras más para acá, que lo recoja en su camioneta, Paquito entra corriendo y yo creo que ya no le daría tanta flojera. Aunque es hora de almorzar, capaz que prefiere quedarse. Bueno, pero si le digo a mi hijo Juancho que venga en su moto, a lo mejor es más rápido, aunque no me gusta mucho que ande en la moto en la carretera. Bueno, total. Ni me preocupo, porque esa moto corre a 30 máximo, que es la mitad de lo que se puede y no le van a poner multa. Claro que tiene que vestirse, porque estaba dormido cuando salí. Ay, ¿qué haré?" Vamos a tratar de definir exactamente qué apoyo te está pidiendo Juan. Parece ser que tiene que llevar un paquete a algo muy importante en Atotonilco, y sé que es importante, porque se menciona que es para el alcalde. Entonces, a lo mejor, yo puedo frasear ese problema como: "¿cómo le hace Juan para tener lo más rápidamente posible el paquete en sus manos?" Pero, fíjate que no todo mundo llega tan fácilmente a que ese es el problema. Algunos podrían pensar que lo que se está pidiendo es: ¿cuál es la distancia? O ¿cuál es el tiempo requerido para llegar con el alcalde? Y, por supuesto, si se imaginan que esa es la meta, pues todo lo que hagan no va a servir de nada para ayudarle a Juan. Entonces, esto tiene que ver con que es un problema que se llama mal definido. Y la verdad, dime si no, así son todos, casi, en la vida. Ahora vamos a ver qué datos tenemos, qué nos arroja el problema en sí. Habíamos visto que hay como tres personajes que pueden traer el paquete. Por un lado, está Paquito, pero tenemos la dificultad de que es medio flojo. Por otro lado, está Esteban, que ese sí es muy cumplidor y tiene una camioneta, pero está a 10 cuadras de donde es la casa de este Juan. Y, finalmente, está el hijo, Juancho, que no está vestido y tiene una moto. El problema no me dice exacto cuánta distancia lleva recorrida Juan, pero parece ser que, a lo mejor, está enredado sacarlo. No lo sé. Bueno, la verdad es que no está enredado, porque como va justo a 60 kilómetros por hora, que es el máximo de velocidad permitida, pues puedo saber que recorre un kilómetro por cada minuto. Y si lleva cinco minutos, pues lleva cinco kilómetros. Pero vamos a ver si esto es relevante o no. Si tenemos que tomar una solución así como muy rápido porque el tiempo apremia, pues, a lo mejor, concluimos que la opción de Paquito no es tan buena, por aquello de la flojera. Por otro lado, la solución de Esteban con Paquito, pues a lo mejor suena mejor, pero ¿qué tal que a la hora de la hora Paquito no quiera? Mejor tampoco. Y en el caso de Juancho, pues resulta que está dormido, pero tiene moto. Ahí, tenemos que contar que va a tardar un momentito en vestirse, porque está en pijama y, además va a usar la moto, que no es tan rápida como el coche del papá. Por lo tanto, seguro va a hacer más de los cinco minutos que había hecho Juan. Pero el chiste es que veamos que no se nos puede cerrar el mundo. ¿Hay otras opciones? ¡Claro que hay otras opciones! Incluso, Juan podría regresarse a su casa, recoger el paquete y volver a ir en camino. Claro que eso le tomaría, cinco minutos y cinco; un total de 10 minutos perdidos. Y claro que hay otras combinaciones. Por ejemplo, Esteban puede irse de volada a casa de Paquito, pedirle la llave y él entrar a la casa de Juan, recoger el paquete y regresar. Eso implica algún tiempo. Va a tardar unos tres minutos en llegar, porque claro que en el pueblo no se puede andar a 60 kilómetros por hora, y unos cinco en alcanzar a Juan, lo cual serían: ocho. Pues, hasta ahorita, va ganando esa opción. Si Paquito quiere colaborar y él lo acompaña, que era una de las opciones iniciales, pues ¡excelente! Pero sería exactamente el mismo tiempo. Pero como pensamos que a lo mejor le va a dar flojera, mejor la desechamos. Pero también tenemos otra opción: Juancho se viste de volada, toma su moto, se va a casa de Esteban, le deja el paquete y Esteban ya se va corriendo con Juan. Eso más o menos implicaría que Juancho tarda como cuatro en llegar con Esteban y él, como está muy cerquita ya de donde está Juan aparcado, pues tardará dos. Entonces, ahí ya son seis minutos. Esa es la buena opción. Para hacer la revisión metacognitiva, tenemos que preguntarnos si llegamos realmente a la meta. Y, para eso, obviamente tenemos que conocer cuál era la meta y recordarla muy bien. Por ejemplo, en este ejercicio que acabamos de hacer, si nuestra respuesta es algo como “cinco kilómetros” o “una hora y diez”, pues eso no responde a la pregunta que nos habíamos establecido, que era: ¿cómo le hace Juan para tener, lo más rápidamente posible, el paquete que le tiene que llevar al alcalde? Entonces, sabemos que ese no fue un camino adecuado, y tenemos que regresarnos y replantear otro procedimiento que nos permita llegar a la meta. Ahora, para conocer cuál es tu nivel de dominio de estos conceptos, te preguntamos algunas cositas. [SONIDO] En esta sesión vimos la revisión metacognitiva, que implica saber si llegamos a la meta, para lo cual tenemos que conocerla perfectamente. En la siguiente sesión estaremos hablando de atención selectiva, que es algo fundamental para aprender muy bien, y es algo que necesitamos para poner a correr a nuestro hámster a todo lo que da.