Hoy abordaremos el tema de orificio de salida. Así pues, el orificio de salida es la parte epitelizada que rodea al catéter, adosándose a él tras de salir del túnel subcutáneo. El orificio de salida tiene dos zonas diferenciadas, una externa, que es la que vemos al abrir o destapar el catéter; y una interna, conocida también como seno, y que localizamos cuando levantamos al catéter o lo movemos de forma lateral. Vamos a hacer la exploración de un orificio de salida. Nos tenemos que poner un cubrebocas como primer paso, tanto nosotros como el paciente, y el siguiente paso es el lavado de manos. Una vez que regresamos del lavado de manos, vamos a descubrir al paciente. Vamos a despegar. [MÚSICA] Y vamos a empezar a explorar. Previamente un guante. Y vamos a empezar por ver la parte externa. Esta es la parte externa. Y vamos a tocar el trayecto del túnel. Vamos a valorar el orificio. Este orificio no trae eritema, no trae tejido de granulación, no trae costra, no tiene dolor a la palpación, el seno está seco, epitelio completo. Por lo tanto, se clasifica como un orificio perfecto. Una vez que nosotros tomamos estos aspectos o estos criterios, vamos a clasificar el orificio de salida en siete categorías. El primero es perfecto; bueno; inequívoco; e infección aguda; infección crónica, infección de cojinete o cuff; el traumatizado. Estas siete categorías, lo vamos a hacer dependiendo de lo que traiga el paciente, y vamos a empezar por el orificio perfecto. El orificio perfecto no trae dolor, no trae costras, no trae epitelio de granulación y, si se forma costra, se forma cada siete días y se cae de forma espontánea. El orificio perfecto lo tenemos después de seis meses de colocación del catéter. Un orificio bueno trae epitelio bien formado, no trae costra o, si se forma, se forma cada tres días y se cae de forma espontánea. El equívoco es un orificio que va a traer secreción, puede venir con eritema menor a 13 milímetros, puede traer dolor. El orificio con infección aguda es un orificio que va a traer secreción purulenta, eritema mayor a 13 milímetros, la secreción es externa y trae dolor. La infección aguda también tiene menos de cuatro semanas. La infección crónica, en este caso, trae secreción interna, secreción externa, pérdida de tejido o del epitelio interno y con una duración de más de cuatro semanas, ausencia de dolor, you no hay dolor. En la infección de túnel, o cuff, o cojinete, en este caso, el paciente puede traer eritema mayor de 13 milímetros, dolor a la palpación y salida de secreción al palpar el túnel. En este orificio, también a veces puede tener you la exposición del cojinete, en este caso, si fuera este el caso, hay que jalar el cojinete para poder extraerlo. Si está muy adosado, el paciente tiene que empezar durante el baño a retraer esta parte para tratar de que sea expuesto lo antes posible. Y el traumatizado, en este caso, trae sangrado, puede traer sangrado, va a venir muy dolorido y este, generalmente, es porque el paciente tiene algún incidente como jalarlo o sufrir un traumatismo, un golpe en el orificio. Para los criterios de clasificación, tenemos dos fases, una que corresponde desde que se coloca el catéter hasta la sexta semana, y que se llama de cicatrización; y la de clasificación propiamente, que es a partir de la séptima semana. Los criterios de valuación, vamos a tener al dolor, a la induración, a la secreción interna, secreción externa, granulación interna, granulación externa, la costra, esta costra, el eritema que vamos a medir y el epitelio interno. Los cuidados de enfermería a cada uno de los orificios que acabamos de ver son, para el orificio perfecto y bueno, sería baño diario del paciente, limpieza posterior al baño con solución fisiológica o agua hervida, secado y fijarlo a la piel. No es necesario el uso de apósito. Para el caso del orificio con infección aguda, infección crónica o de túnel, los cuidados serían toma de cultivo; curación cada 24 horas o cada 12 horas, dependiendo de cada caso; inicio de antibiótico de forma empírica; y una vez que se tenga al germen causal, pues dar el tratamiento adecuado a cada uno de estos gérmenes; seguimiento cada siete días, cada cinco días para la mejora de estas infecciones. En el caso del orificio traumatizado, solamente tendremos que hacer limpieza con solución salina, obviamente traer apósito hasta que sane y dar seguimiento cada tercer día para evitar que se vaya a infectar. Las infecciones de orificio de salida conllevan a mortalidad y morbilidad en los pacientes en terapia dialítica. Uno de los grandes retos que tenemos es disminuir estas infecciones y esto es a través de la educación que enfermería da a los pacientes para los cuidados en casa. El reto más importante es disminuir el índice de infecciones de orificio de salida y así contribuir al éxito de la terapia. Para concluir, abordaremos la educación del paciente en el siguiente módulo. [MÚSICA]