[MUSIC] Como te hemos dicho en esta lección, la evaluación es de dos tipos, la evaluación de proceso y la evaluación de resultados. En cualquiera de los dos casos, la metodología de la teoría del cambio nos pide que en el proceso de planificación definamos cómo vamos a comprobar que, 1, estamos haciendo lo que nos comprometimos a hacer. 2, estamos logrando lo que buscamos. Para verificar estas dos cosas debemos definir lo que se conoce como indicadores. Los indicadores son datos o información concreta sobre los hechos que describen las características de nuestra iniciativa al responder preguntas tales como ¿qué estamos haciendo? ¿Cómo lo estamos haciendo? ¿A quién estamos llegando? ¿A cuántas personas estamos atendiendo? ¿Qué estamos logrando? Por ejemplo, un indicador que permite establecer el alcance que están teniendo nuestras acciones es el de cobertura. Que es el dato que necesitamos para responder a la pregunta, ¿qué porcentaje de personas, grupos, instituciones, organizaciones, ciudades o países estamos cubriendo con nuestras acciones? Los indicadores nos permiten verificar el progreso o, como you dijimos, la falta de progreso hacia el resultado que buscamos. Además, los indicadores son muy importantes, porque nos permiten establecer de qué manera vamos a reconocer que estamos teniendo éxito, que hemos llegado a nuestro destino. Es como la bandera que levanta el árbitro para señalar que el jugador ha llegado a la meta o ha anotado un gol. A continuación vamos a describir el tipo de indicadores que podemos usar en la evaluación de proceso y de resultados, pero antes te invito a responder un par de preguntas. [MUSIC] Como you te dijimos, los indicadores nos permiten tener evidencia de cómo vamos avanzando en la ejecución de lo planeado y en el logro de los resultados. Esta información es clave para asegurar que vamos en la dirección correcta. También nos ayuda a mantener a las personas, los grupos, las comunidades y las organizaciones financiadoras motivadas y comprometidas con la iniciativa. [MUSIC] Para comenzar, podemos decir que los indicadores pueden clasificarse teniendo en cuenta varios criterios, aquí vamos a tener en cuenta tres. 1, según el tipo de características que nos permiten evaluar, los indicadores pueden referirse a características individuales, como, por ejemplo, los conocimientos, las actitudes y las habilidades. O a características interpersonales, como la estructura y la funcionalidad de la red social. O a características contextuales, como la oferta de oportunidades, las normas sociales o la equidad en las condiciones que contribuyen al bienestar. 2, según el tipo de hecho que nos interese evaluar, los indicadores pueden ser observables, como, por ejemplo, el número de personas que participa en un evento comunitario o el porcentaje de miembros de la comunidad que logra vincularse laboralmente. O subjetivos, como, por ejemplo, la valoración que hacen las personas de las actividades o sus opiniones sobre los cambios que experimentan en sus condiciones de vida como resultado de la iniciativa. 3, según el tipo de dato que recojamos, los indicadores de evaluación pueden ser cuantitativos o cualitativos. Los cuantitativos se expresan de manera numérica, es decir, a través de números, porcentajes, promedios. Los cualitativos, en cambio, describen las características de lo que sucede y lo que se consigue. Como observas en la pantalla, los indicadores cuantitativos responden a preguntas acerca de ¿qué tanto?, ¿qué tan frecuentemente?, ¿cuántos? Los indicadores cualitativos, por su parte, responden preguntas sobre ¿qué?, ¿quién?, ¿cuándo?, ¿dónde?, ¿cómo?, ¿de qué manera?, y ¿por qué? Independientemente del criterio que estemos usando para definir los indicadores, estos deben cumplir los siguientes requisitos para asegurar que cualquier persona pueda usarlos para valorar su iniciativa. O usarlos para comparar lo que hace con lo que hacen otras personas para lograr los resultados similares. Claros, es decir, precisos, formulados sin ambigüedades. Importantes, es decir, apropiados para obtener información sobre las características que se desea evaluar. Económicos, disponibles, que se pueden obtener a bajo costo. Pertinentes, que proveen la información que se requiere para valorar el funcionamiento de la iniciativa y su importancia. Verificables, la persona, grupo u organización encargada de la iniciativa está en capacidad de obtener esa información. La información que te acabamos de presentar, sobre los tipos de indicadores y las características que deben tener, va a ser muy útil para definir cómo vas a evaluar tú la iniciativa. A continuación te vamos a presentar una guía que te va a facilitar esta tarea. Sin embargo, para aprovechar esa parte de la lección es importante que previamente realices la actividad que te proponemos a continuación. [MUSIC]