[MÚSICA] Durante la clase anterior, identificamos a los potenciales beneficiarios y clientes. Ahora es momento de empezar a generar posibles ideas de solución al problema identificado, y para eso trabajaremos a través del desarrollo de la creatividad y la fase de ideación. Si nos ponemos a pensar, si nos ponemos a pensar, muchos de los grandes inventores o emprendedores de la historia se han caracterizado por ser importantes creativos. Thomas Edison, Leonardo Da Vinci, Albert Einstein, y ellos son el mejor ejemplo de la definición que da Ken Robinson, la creatividad es el proceso de desarrollo de ideas originales. Pero, ¿por qué es tan importante la creatividad? Vamos a destacar cuatro elementos que validan su importancia. Primero, enseña a tu mente a mantenerse activa. Las personas curiosas siempre hacen preguntas y buscan respuestas en sus mentes; dado que la mente es como un músculo que se fortalece mediante el ejercicio continuo, el ejercicio mental, causado por la curiosidad, hace que se vaya haciendo cada vez más fuerte, eso nos permite mantener activa nuestra mente. Segundo, enseña a tu mente a reconocer las nuevas ideas. Cuando se tiene curiosidad por algo, la mente aprende a esperar y a anticipar nuevas ideas relacionadas. Sin curiosidad, las ideas pueden pasar frente a ti sin reconocerlas como oportunidades. Tercer elemento, ayudar a abrir nuevos mundos y posibilidades. Aprendiendo a ser curioso, uno puede reconocer nuevos mundos que normalmente no son visibles, están escondidos detrás de la superficie de la vida normal, y se necesita una mente curiosa para mirar debajo de esta superficie y descubrir estas nuevas posibilidades. Finalmente, la creatividad aporta emoción al desarrollo del emprendimiento social. La vida de gente curiosa no es aburrida ni rutinaria. Con la creatividad podrás descubrir, observar y proponer soluciones para tu emprendimiento que quizá nunca hubieras imaginado. Esto es una característica fundamental también para el emprendedor que tendrá una vida y un trabajo aventureros y emocionantes. Si nos proponemos integrar la creatividad al proceso de creación y diseño del emprendimiento social, debemos desarrollarla. Por eso les daremos algunos consejos para hacerlo. Muy importante es la empatía, mencionaba anteriormente. Ser capaces de repensar el mundo desde distintas perspectivas, colegas, clientes, beneficiarios, usuarios. El enfoque centrado en las personas nos permite imaginar soluciones deseables y que cumplan con sus necesidades pero desde sus propias realidades. Otro consejo es tener un pensamiento integrador. Es decir, aprender a no solo depender de procesos analíticos que se queden en evaluaciones y análisis, sino que también tengamos la habilidad de reconocer aspectos sobresalientes, que ofrecen soluciones novedosas, que vayan más allá, que mejoren dramáticamente alternativas existentes. Aunque pareciera extraño, es clave el optimismo para desarrollar la creatividad. Asumir que no importa cuán desafiantes sean las restricciones y dificultades del problema, pero siempre, siempre al menos una de las potenciales soluciones es mejor que mantener la problemática existente. Saber mirar más allá de las propias limitaciones y creer en la posible implementación. En cuarto lugar, la experimentación. Las innovaciones significativas surgen de probar y probar. Los verdaderos creativos plantean las preguntas, exploran las reflexiones que pueden tener, y, finalmente, validan las soluciones experimentando una y otra vez. El último elemento es la colaboración. you no existe la figura del genio creativo solitario, ahora es clave la colaboración entre las personas involucradas, pero también entre distintas culturas, generaciones y, principalmente, disciplinas. Si logramos mantener todas estas prácticas y actitudes, estamos en la posición perfecta para comenzar a proponer posibilidades de solución y pasar a la fase de la ideación. Con la ideación, buscaremos concebir distintas y variadas ideas de solución a nuestro problema. Idear significa provocar a la creatividad utilizando toda la información en los hallazgos identificados durante la fase de exploración del problema, y que nos permite divergir en torno a alternativas de solución. Por lo general, en esta primera etapa, buscamos generar la mayor cantidad de ideas posibles, no importa la calidad, sino la cantidad. Algunas de ellas nos encantarán, otras serán demasiado locas, otras serán desechadas, pero no hay que poner límites en esta etapa de divergencia. La mejor forma de tener una buena idea es teniendo muchas ideas, dice Linus Pauling. Luego viene la etapa de la convergencia, donde el objetivo es reducir las ideas de solución hasta escoger una para hacerla tangible, prototiparla y continuar redefiniéndola. Aquí es importante repasar los hallazgos identificados, recordar el trabajo realizado por los beneficiarios, usar la experimentación y colaboración, entre otras cosas, para llegar a la idea de solución que produzca mayor impacto. Como ejemplo de herramienta para divergir, tenemos el conocido método de la lluvia de ideas o brainstorming, se trata de echar a volar nuestra imaginación sin limitaciones. Es importante incentivar el pensamiento divergente, proponer sin vergüenza, decir cosas locas, tontas y hasta imposibles. El proponer soluciones que son, indudablemente, impracticables a menudo suscita ideas que resultan relevantes y razonables. Es frecuente que nuestras primeras ideas resulten obvias o no sean novedosas, nuestro cerebro tiende a proponer cosas que están dentro de su zona de confort; y una lluvia de ideas es la forma de forzarnos a salir de ahí y nos obliga a generar más y más ideas. Al concentrarnos en la cantidad, dejamos rápidamente atrás soluciones obvias y entramos a lo desconocido, lugar donde podemos llegar a encontrar soluciones con verdadero valor para el beneficiario. Veremos la aplicación de esta herramienta de manera práctica con un video de brainstorming. [MÚSICA] [MÚSICA] >> Hola. Bienvenido a una nueva video dosis de Marketing Turístico. Hoy vamos a hablar de las lluvias de ideas, y te vamos a dar cuatro claves para que triunfes con este proceso. [MÚSICA] Una lluvia de ideas o un brainstorming es un proceso creativo primario, te servirá para crear conceptos no solo publicitarios y marketinianos, sino de cualquier tipo. Podrás crear un nuevo servicio, un nuevo producto o incluso una receta. Vamos a ver cuáles son las claves. [SONIDO] Para empezar, prima la cantidad. En esta fase tan primigenia a la creación de ideas, es muy importante que primes la cantidad frente a la calidad. Es mucho mejor que tengas diez ideas que crees que pueden encajar, que una que sabes que es la mejor. Imagínate cuando se la presentas a tu jefe o a tu cliente no les gusta. Entonces, céntrate en intentar encontrar tantas opciones como posibles soluciones al problema que encuentres. [SONIDO] Prohibido prohibir. No se pueden poner límites a la imaginación, ¿verdad? Pues tampoco se los pongas a la creatividad. Nada corta más que un compañero diciéndote un no rotundo, o diciéndote que una idea tuya no vale. Si para crear es necesario tener imaginación, en cualquier proceso creativo es imprescindible que se nieguen las negaciones. [SONIDO] En tercer lugar, cambia los peros por un además. Con esta sencilla regla lograrás poner en marcha las dos anteriores claves. Fíjate que si cambias todos los peros por un además, dejas de bloquear ideas de otra persona para sumar nuevas ideas al proceso creativo. Así que nunca te olvides de poner en marcha mi regla favorita de los brainstorming, cambiar todos los peros por un además. [SONIDO] Y por último, todas las ideas son igual de válidas, igual que todos los miembros que participan en la lluvia de ideas tienen que tener la misma importancia, es decir, desde el directivo hasta el becario. Todo el mundo que participa se tiene que sentir lo suficientemente confiado, como para saber que la idea que va a proponer se va a tener en cuenta. Como ves, son cuatro reglas que con dejarlas claras antes de empezar una lluvia de ideas, te van a ayudar a que ese proceso creativo sea más creativo si cabe, y si quieres saber mucho más sobre cómo hacer una lluvia de ideas mejor, no te olvides de descargarte la infografía que encontrarás en la descripción de este video. Y nada, you nos contarás qué tal te ha ido. Chao. [MÚSICA] [MÚSICA] >> Después de generar grandes cantidades de ideas para solucionar la problemática social, se hace difícil saber por dónde y cómo comenzar, >> y, sobre todo, qué idea escoger en la etapa de convergencia. En una clase anterior mencionábamos la herramienta de las tres lupas, que puede ser un buen punto de partida para esta etapa. Decimos que durante la fase de convergencia llevamos a cabo la síntesis, e identificamos las ideas claves, las mezclamos, clasificamos, agrupamos y éstas van evolucionando y refinándose hasta que estamos en posición de escoger una idea central que nos sirva como base de nuestra solución. Una forma de llevar a cabo esta síntesis es a través de una matriz de selección, que nos permita realizar un mapeo visual de las numerosas ideas que se generaron durante la fase de divergencia, y ordenarlas según su originalidad y factibilidad. Es importante que recordemos que el objetivo no es necesariamente eliminar ideas, sino que organizarlas para saber en qué enfocarnos y qué ideas conservar para otra fase. Una matriz de selección ubica a todas las ideas en cuatro cuadrantes. Como puedes ver, las ideas que deben ser priorizadas son aquellas del cuadrante superior derecho you que son originales y factibles, por lo que decimos que son ideas con alto potencial de impacto. Por otro lado, en el cuadrante superior izquierdo, ubicamos aquellas ideas originales que todavía no son factibles, o como dice el cuadro, inviables por ahora. Esto puede ser por varias razones, por limitaciones tecnológicas, económicas o sociales, es decir, que aún no pueden ser implementadas por lo que debemos mantenerlas en mente para cuando las condiciones mejoren. Los bloques ubicados en la parte inferior de la matriz agrupan, por el lado izquierdo, aquellas ideas que no valen la pena desarrollar debido a que no son viables y tampoco originales. Hacia el lado derecho, encontramos las ideas que sí son viables pero también son comunes, por lo que, dependiendo del emprendimiento social, podrían incluirse, pero no aportarían el factor innovador. Teniendo claridad sobre las ideas a desarrollar, estamos en posición de adentrarnos en el siguiente desafío, el diseño de nuestro emprendimiento social que será la temática a trabajar la próxima semana. [AUDIO_EN_BLANCO]