Hola. Un saludo para cada uno de ustedes. Vamos a aplicar ahora este tema: "Conceptos de riesgo y apalancamiento". La pregunta que me hago es: ¿qué debemos tener presente en la empresa al momento de tomar la decisión de cuál es la estructura de financiamiento recomendable para la empresa? Voy a suponer que el negocio propiamente tal que estamos conversando, este de riesgo medio, tienes dos posibles rentabilidades anuales de sus dueños. Voy a ver cuáles son las posibles rentabilidades anuales de sus dueños. Si la empresa no usa deuda con los bancos, fíjense cuál es el rango de resultados posibles para sus dueños. Voy a suponer que si a la empresa, operacionalmente, le va bien, podría tener una rentabilidad de 16 por ciento, y voy a suponer que si le va mal, su rentabilidad sería negativa de 4 por ciento. ¿Cuál sería la rentabilidad para los dueños de esta empresa, si ella no usa deuda? Sería esta misma. El rango estaría entre 4 y 16. Si no usa deuda, la rentabilidad para el dueño sería la misma que la del negocio propiamente tal. Pero ahora hagámonos la pregunta, ¿qué pasaría con esta misma empresa en que estos, entre 4 y 16, fuera el rango de resultados posible de su negocio propiamente tal, si tuviera deuda? Si tuviera deuda con bancos, por ejemplo, la mitad de su financiamiento fuese deuda, y la mitad fuese patrimonio. Fíjense que, entonces, el rango de resultados posibles para un dueño se vería absolutamente amplificado. Ya no estaría entre 4 y 16 por ciento para los dueños, que sería el rango si esta empresa no hubiese usado deuda. Si hubiese usado deuda, estos números son simplemente ejemplos académicos, por favor, no busquen algún cálculo, sino que la idea que estoy mostrando, lo que estoy diciendo es que si esa empresa hubiese usado deuda como parte de su financiamiento, estoy suponiendo la mitad del financiamiento deuda y la mitad patrimonio, los resultados posibles para su dueño se habrían amplificado enormemente. Si a la empresa le hubiese ido bien operacionalmente, al dueño le hubiese ido muy bien, 24 por ciento. Pero si a la empresa, operacionalmente, le hubiese ido mal, por el hecho de tener deuda al dueño le hubiese ido más mal, no voy a decir qué tan mal, pero más mal que si no hubiese tenido deuda. Si ustedes piensan en términos muy amplios, que cada uno de estos resultados posibles, 4 y 16, tuviera un 50 por ciento de probabilidades, entonces, simplemente 50 por ciento por 16 menos 50 por ciento de 4, porque es negativo, les daría una rentabilidad esperada para el dueño de esta empresa de 6 por ciento. Si hace lo mismo para esta empresa, 50 por ciento de probabilidades, 50 por ciento de probabilidades, le daría una rentabilidad esperada al dueño del 8 por ciento. Y yo les pregunto a ustedes, ¿qué prefieren?, ¿una rentabilidad esperada para vuestra inversión de 6 por ciento, pero en que si les va bien tienen 16 por ciento, pero si les va mal solo 4 por ciento, o una rentabilidad esperada de 8 por ciento en que sabemos que si le va bien, 24 por ciento, pero si les se mal se van un 8 por ciento de pérdida? ¿Cuál prefieren? Esto es el efecto que produce la deuda, un efecto amplificador. De hecho, si ustedes ven el rango posible de acá, lo que está ocurriendo es que de toda esta variabilidad de la rentabilidad del dueño por el hecho de haber usado deuda, esta es la parte que se explica por el negocio y el resto es el efecto amplificador producto de usar deuda. La verdad es que aquí hemos hecho el ejemplo con una empresa con riesgo medio, y si el caso fuese una empresa de riesgo de negocio alto como turismo o pesca, la verdad es que esta línea verde sería más amplia, el rango de resultados posibles, porque son negocios de más riesgo, más incertidumbre, más variabilidad y el efecto del apalancamiento o del endeudamiento haría que se exacerbara más todavía el riesgo para el dueño de la empresa. Vamos a las conclusiones finales. Primera conclusión, la variable más importante a considerar al momento de tener que decidir la mezcla de financiamiento de la empresa es la actitud frente al riesgo de los dueños. Todos somos adversos al riesgo, pero tenemos ciertos niveles de aversión al riesgo. Segundo. Debemos tener presente el riesgo del negocio propiamente tal. Probablemente, en un negocio en que, de suyo, es de alto riesgo, como puede ser el turismo, yo voy a preferir niveles de endeudamiento más bajo. Tercero. El financiamiento con deuda tiene un costo menor que el financiamiento con patrimonio, simplemente porque ella tiene un menor riesgo para el que aporta dicho recurso. Cuarto. El endeudamiento de suyo no es bueno ni malo, es el resultado de una decisión de los dueños de la empresa de correr más o menos riesgos, de enfrentar una mayor o una menor variabilidad en los resultados posibles de su inversión. Siguiente. Los dueños deben tener claro que mientras mayor sea el riesgo de resultados posibles de su inversión, mayor debiera ser el valor esperado de la rentabilidad de dicha inversión. Cuando a una empresa operacionalmente le va bien y esa empresa está endeudada, a sus dueños, le va muy bien. Pero si a una empresa operacionalmente le va mal y se endeuda, a sus dueños le va muy mal. O sea, es una cuestión de riesgo. No lo olvide, este es el gran "trade off", la compensación. Mayor riesgo, de acuerdo, mayor rentabilidad esperada, pero si nos endeudamos, y operacionalmente nos va mal, lloremos todo lo que queramos, pero era lo que sabíamos que nos podía ocurrir. Me despido de usted. Ojalá haya podido hacer un aporte a través de esta [inaudible] financiero, a lo que pueda ser el desarrollo de vuestro negocio.