Hemos visto que, con los flujos de fondos de una inversión y el costo de oportunidad de inversiones similares, se puede calcular el Valor Actual Neto. Si ese "VAN" es mayor que cero, la inversión analizada es buena. Pero nos queda una incógnita, ¿cuál es la rentabilidad de esa inversión? Esta pregunta la responderemos con la Tasa Interna de Retorno o, simplemente, la TIR, que veremos a continuación. Comencemos analizando la siguiente inversión. Si la rentabilidad mínima exigida, es decir, el costo de oportunidad es diez por ciento, tenemos que el "VAN" es positivo, por lo que la inversión es buena. Pero no sabemos cuánto es la rentabilidad, tan solo que es mayor que diez por ciento. Si bien la rentabilidad mínima es un dato, nada me impide que calcule el hipotético VAN que tendría si la tasa de descuento fuera "cinco" por ciento. El "VAN", ¿será más grande o más pequeño? Ya sea mirando la fórmula o pensando intuitivamente, es fácil ver que el Valor Actual crece si la tasa baja. Pensemos que se requiere más dinero hoy, para obtener un mismo valor futuro con una rentabilidad alternativa más baja. Efectivamente, el "VAN" de nuestro flujo calculado con una tasa de "cinco" por ciento, nos da 70,11. Si, por el contrario, incrementamos la tasa a 20 por ciento, el "VAN" será menor, en particular, será negativo, lo que significa que la inversión tiene una rentabilidad menor a 20 por ciento. Sabiendo que la rentabilidad está entre "diez" y 20 por ciento, veamos cuánto es el "VAN" con una tasa del 15. Nuevamente, nos dio negativo, acotando el rango de rentabilidad entre el "diez" y el 15 por ciento. Si probamos con el 12 por ciento, el "VAN" volverá a ser positivo, dejando el rango entre 12 y 15 por ciento. Si seguimos reduciendo el rango, eventualmente, llegaremos a una tasa cuyo "VAN" sea "cero". Podemos graficar el procedimiento que acabamos de realizar colocando, en el eje horizontal, las diferentes tasas de descuento y, en el eje vertical, los "VAN" obtenidos con cada tasa. El "VAN" correspondiente al diez por ciento es el verdadero "VAN" del proyecto. Vemos que, si reducimos la tasa, el "VAN" crece, como en el ejemplo del cinco por ciento. Mientras el "VAN" es positivo, sabemos que el proyecto rinde más que la tasa de descuento utilizada. Por el contrario, cuando el "VAN" es negativo, el proyecto rinde menos que la tasa de descuento. Podríamos decir entonces, que cuando el VAN es "cero", la tasa de descuento utilizada es lo que efectivamente rinde el proyecto, y ésta es, justamente, la definición de la Tasa Interna de Retorno. Con la Rentabilidad Mínima y el Flujo de Fondos de una inversión podemos calcular el "VAN". Nuestra inversión será aceptable si el "VAN" es mayor que "cero". ¿Cómo utilizo la "TIR" para evaluar una inversión? Para calcular la "TIR", basta con el flujo de fondos. Pero la rentabilidad mínima también aparece, en este caso, como el umbral que indica cuándo la "TIR" y, por ende, el proyecto, es aceptable. Comenzamos este video con la incógnita que nos dejaba planteado el método del "VAN" para evaluar inversiones. La rentabilidad de un flujo es justamente la Tasa Interna de Retorno, que se define como aquella tasa de descuento que iguala el "VAN" a cero. La regla de decisión es sencilla, un proyecto será bueno si su "TIR" es mayor que la Rentabilidad Mínima requerida. Si bien no lo hemos mencionado porque será el objeto del próximo video, es importante notar que mientras que el método del "VAN" funciona adecuadamente, la "TIR" presenta algunos problemas que requieren precaución.