Hola a todos y todas. Vamos a trabajar hoy día en la ejemplificación de prácticas generativas, que son un elemento muy fundante de la formación docente basada en la práctica. A través de esta ruta de aprendizaje, vamos a aprender a clasificar las prácticas generativas de acuerdo con diferentes focos en el ámbito de acción de profesores y profesoras. ¿Cómo contribuimos a que los profesores principiantes perciban que tienen los recursos para generar oportunidades de aprendizaje para todos los estudiantes? El que sientan que tienen las herramientas, que tienen los recursos, para hacerse cargo de esto que está muy relacionado con lo que se conoce en la literatura como autoeficacia docente, que tiene alta correlación con la eficacia docente también. Entonces, sabemos que al iniciar su experiencia laboral un profesor tendrá que, necesariamente, facilitar oportunidades de aprendizaje para estudiantes con distintos niveles de desempeño. También tendrá, entre otras cosas, que conducir una reunión de padres o apoderados. Y, también, colaborar con otros profesores y profesionales para facilitar el aprendizaje. Eso lo hace desde que se incorpora en el campo laboral, desde muy temprano, los primeros días de su ejercicio profesional. Sabemos que eso es así, sabemos que esas son las tareas o, entre otras, una de las tareas que enfrentan los profesores desde el inicio de su ejercicio profesional. Notemos que los profesores en formación, sin embargo, invierten mucho tiempo en la planificación de la enseñanza. La planificación y la reflexión de la enseñanza son actividades que ocupan parte importante de la formación. Hay varias dimensiones del ámbito de acción de los profesores, para las que tienen menos oportunidades de desarrollo y aprendizaje. Entonces, ¿qué prácticas generativas enfatizar en la formación inicial docente? Distintos equipos que han trabajado ya el tema de las prácticas generativas en el mundo, las han enfrentado con distintos niveles de especificidad. Por ejemplo, hay equipos que trabajan a nivel de asignatura, descomponen la práctica de enseñanza del lenguaje, de la historia, de matemáticas, especialmente la Universidad de Stanford. Hay otros equipos, que ponen el énfasis en entender las interacciones de aula, lo que pasa dentro de la sala de clase. Y ahí está su foco y análisis de poder determinar cuáles son las prácticas generativas, por ejemplo, para el aprendizaje de la ciencia, que se dan en las interacciones pedagógicas productivas. Y, por último, hay equipos como el de la Universidad de Michigan, que trabaja fundamentalmente con estrategias como la planificación, la evaluación, la comunicación y las interacciones de manera más global, aunque luego se aterricen o se operacionalicen en determinadas asignaturas y contextos. Nosotros vamos a profundizar justamente en esta última forma de abordar las prácticas generativas, que es la que propone la Universidad de Michigan y el Centro Teaching Works de la misma universidad, que señala fundamentalmente como seis familias de prácticas generativas o focos distintos de prácticas generativas. Que se pueden clasificar en unas prácticas generativas que tienen que ver con el diseño y planificación de la enseñanza, otras que tienen que ver con las interacciones de aula, otras que tienen que ver fundamentalmente con la evaluación, otras con el liderazgo en el aula, lo que significa el manejo de las interacciones de la sala de clase, comunicación y reflexión. Vamos a profundizar un poco en cada una de estas familias, para tener algunos ejemplos que nos permitan hacernos una idea de qué se tratan la prácticas generativas en cada uno de estos ámbitos. Entonces, en relación con la planificación hay un nivel bien específico, que es una práctica generativa que tiene que ver con proponer tareas para una meta específica de aprendizaje, muy focalizada en una experiencia local de enseñanza de una disciplina en particular. Luego, más extensivo es poner metas de corto y mediano plazo para los alumnos, que implican alinearse con referentes externos, fundamentalmente un manejo del currículum que permita diseñar estas trayectorias. Evaluar, elegir y modificar tareas y textos en función de una meta de aprendizaje específica. Los profesores tienen a su disposición diferentes materiales y recursos de enseñanza, la idea es que puedan ajustarlo a los objetivos y metas de enseñanza que ellos enfrentan. Y diseñar una secuencia de clases para lograr una meta específica de aprendizaje, planificación de unidades, de trayectorias más globales de enseñanza. En relación a la familia que tiene que ver con las interacciones de sala de clase, lo que pasa entre el estudiante, el profesor, el contenido y entre los estudiantes, se sintetiza en prácticas generativas que tienen que ver con explicar y modelar contenidos, prácticas y estrategia. Independiente de cual sea la orientación o el foco del profesor en algún momento, explica usando representaciones o ejemplos, conduce discusiones productivas que permitan a los estudiantes expresar su razonamiento y, fundamentalmente, interactuar entre ellos. Elicitar e interpretar el pensamiento de cada estudiante para entender qué trae y qué puede estar facilitando lo que trae u obstaculizando el aprendizaje de nuevos conocimientos y contenido. Establecer normas y rutinas para el discurso de la sala de clase, propias de cada una de las disciplinas. Reconocer patrones comunes del pensamiento de los estudiantes, es decir, elicitar el pensamiento y poder ir categorizándolo estableciendo patrones, a los que finalmente pueda dar respuesta pedagógica. En relación a las evaluaciones, fundamentalmente el foco en la evaluación está en poder hacer evaluaciones tanto, entre clases como dentro de cada clase, que se conoce como evaluaciones formativas, poder seleccionar y usar métodos específicos con este fin. Por otra parte, también interpretar, elaborar y seleccionar pruebas de evaluaciones sumativas. Entonces tenemos, por una parte, lo formativo que te permite ir monitoreando clase a clase, pero también poder hacerte una idea general a través de evaluaciones sumativas. Y, por último, dar retroalimentación oral y escrita, la retroalimentación que es uno de los factores más importantes para el aprendizaje de los estudiantes, tener experiencias para poder dar retroalimentación tanto oral como escrita a los estudiantes sobre su trabajo. En relación al liderazgo en el aula, lo que enfatizamos es fundamentalmente facilitar y conducir trabajo en grupo pequeño, especialmente cuando los profesores tienen que hacerse cargo de grupos grandes, el tener estrategias que les permitan segmentar estos grupos y trabajar en grupos pequeños para generar mayor interacción entre ellos y poder monitorear su trabajo, se vuelve muy relevante. Implementar rutinas organizacionales, procedimientos y estrategias para generar un ambiente de aprendizaje. La sala de clases tiene un sinnúmero de complejidades que implica una importante coordinación por parte del profesor, y esta práctica se refiere justamente a poder orquestar este tipo de oportunidades. Involucrarse estratégicamente en conversaciones que contribuyan al fortalecimiento de la relación con los estudiantes. Tener relaciones robustas y nutritivas con los estudiantes en la puerta de entrada para poder influir en ellos y poder lograr aprendizajes de calidad. Por otra parte, estrategias o prácticas generativas que tienen que ver con la comunicación, cuando un profesor empieza a trabajar como veíamos anteriormente, necesita comunicarse con otros profesionales, ya sea otros profesores o profesores de otras disciplinas u otras áreas, o profesionales de otras disciplinas y otras áreas, y comunicarse con los padres y apoderados sobre los estudiantes y sus trayectorias de aprendizaje. Finalmente, un elemento clave para el desempeño profesional es la reflexión, que significa analizar la enseñanza con el propósito de mejorarla continuamente. Estas 19 prácticas se pueden abordar en los distintos momentos de la trayectoria. La pregunta es, ¿cómo estamos abordando estas prácticas claves para la enseñanza en la formación inicial? Si se fijan en esta tabla, en la primera fila, cuando aparece el número del uno al 19, está señalando las prácticas generativas que acabamos de comentar. En la primera columna aparece "C1", "C2", "C3", que son los distintos cursos que los estudiantes pueden tener en el transcurso de su formación. Lo que queremos representar acá, es que hay distintos niveles de aproximación a la práctica, para los que hay que generar oportunidades durante la trayectoria formativa. Entonces, por ejemplo, si nos fijamos en la tercera columna, si fue en la práctica generativa dos, de guiar discusiones productivas con todos los estudiantes. Podemos ver que en el curso dos esta práctica se trabaja a un nivel de introducción y preparación, en el curso tres también, para en el último curso que aparece, que generalmente son las prácticas, tenga oportunidades de poner en acto y analizar. Es decir, que aquí tiene oportunidades de preparar su enseñanza, de ponerla en acto y de analizar. Sin embargo, si miramos la práctica ocho, que es trabajo en grupo pequeño, aparece que si nosotros hacemos este análisis de la trayectoria nos permite darnos cuenta que parece que las oportunidades que estamos generando son más bien a nivel de introducción, a nivel representacional, lo mismo con la práctica de generar retroalimentaciones orales y escritas. Entonces, el tener esta panorámica nos permite ir dando cuenta de cómo estamos abordando las distintas prácticas generativas. Por ejemplo, nos damos cuenta que la práctica de tener rutinas organizacionales puede o podría estar abordándose exclusivamente a nivel de práctica, en poner en acto y reflexionar. Y también podríamos darnos cuenta que hay una práctica generativa que podría ser, por ejemplo, la comunicación con padres y apoderados, que no estamos abordando del todo en la formación. El contar con esta panorámica, esta herramienta, nos permite realmente generar oportunidades de aprendizaje en todas las dimensiones que nos proponemos, de tal manera de que los estudiantes tengan realmente estas aproximaciones sucesivas en todas las prácticas generativas que se trabajen en la formación. ¿Qué aprendimos? Las prácticas generativas se pueden clasificar según los ámbitos de acción profesional. Las prácticas también se pueden especificar según las asignaturas en las que se ponen en acto. Durante la formación inicial, se pueden distribuir a lo largo de la malla curricular según distintos niveles de aproximaciones, por lo que tenerla claramente definida te permite una mejor gestión del currículum.