La "industria" de la salud y las decisiones de los agentes involucrados: bases de la necesidad de regulación. Bienvenidos a esta sesión en la cual abordaremos la primera parte del tema referente a la industria de la salud y las decisiones de los agentes involucrados. Especialmente, abordaremos las bases de la necesidad de la regulación. La teorÃa económica tradicional asume que las personas, al interior de un mercado, se comportan de manera racional, informándose respecto a los productos que se ofrecen y eligiendo la opción que les otorgue más beneficios. Sin embargo, vemos ejemplos en la realidad en donde ocurre exactamente lo contrario. ¿Por qué alguien fumarÃa si sabe que puede desarrollar cáncer de pulmón? O, ¿por qué alguien se negarÃa a cambiar su plan de salud por uno más conveniente, aún cuando se dé cuenta de esta diferencia? Esta clase de comportamiento responde a sesgos cognitivos, que tienen grandes consecuencias en la forma en que las personas toman decisiones en salud y en la eficiencia de los mercados de salud. En esta clase estudiaremos el concepto de mercado perfectamente competitivo y analizaremos los sesgos de comportamiento que hacen que las personas no siempre actúen de manera racional dentro de un mercado. En esta clase se revisarán los siguientes temas. CaracterÃsticas de un mercado competitivo y la diferencia con el sector salud. Limitaciones de la teorÃa económica. CaracterÃsticas de un mercado competitivo y la diferencia con el sector salud. El concepto "mercado perfectamente competitivo", más allá de servir como un modelo atractivo al que aspirar, sirve como un patrón ideal para comparar mercados del mundo real que son imperfectos. En un mercado perfecto, la asignación de recursos se realiza de manera óptima, beneficiando a compradores y oferentes. Esto, en algunos casos funciona adecuadamente, en otros parcialmente y en otros, como en salud, no funciona o funciona con muchas fallas, lo que puede llevar a problemas de servicios de baja calidad, alto costo, demanda inducida, decisiones con poca información de parte de los pacientes y otros problemas derivados de que difÃcilmente se cumplen las caracterÃsticas del mercado perfectamente competitivo. Supuestos del modelo de mercado perfectamente competitivo. Existen siete supuestos que posibilitan un mercado perfectamente competitivo y que se resumen de la siguiente manera. Información completa: los compradores saben cuánto, cuándo y qué consumir, asà como la calidad de los bienes. Transacciones impersonales: compradores y vendedores actúan independientemente. Bienes privados: solo la persona que consume el bien se ve afectada por este. Motivación egoÃsta: los compradores están solo ahà por la satisfacción y los vendedores por las ganancias. Muchos compradores y vendedores: ni vendedores ni compradores pueden influenciar el precio del mercado. Libre entrada y salida: cualquier persona que desee vender productos puede hacerlo, y cualquiera puede salir del mercado cuando lo desee. Productos homogéneos: los compradores no pueden distinguir ninguna diferencia entre los productos y/o vendedores. Limitaciones de la teorÃa económica. La teorÃa económica tradicional asume que las personas se comportan de manera racional. De esta forma, según esta teorÃa, las personas, al enfrentarse a las decisiones de adquisición de productos o bienes, buscan información sobre la calidad y el costo de todas las opciones factibles y utilizan adecuadamente esta información para maximizar su utilidad. Es decir, toman la decisión que más les conviene y saben qué es lo que más le conviene. No obstante, la realidad es que muchas personas no actúan de este modo ni tienen tal información, y existen variadas maneras en las cuales el comportamiento de la gente se desvÃa de lo señalado por la teorÃa económica racional. Estas desviaciones no son aleatorias ni triviales, sino que representan patrones sistemáticos de sesgos cognitivos con enormes implicaciones para la salud y la atención médica. Algunos de estos sesgos son los siguientes. El sesgo de status quo se refiere a la preferencia de las personas por el estado actual de las cosas y el deseo de no hacer las cosas de forma diferente, preferencia que, naturalmente, puede llevar a malas decisiones. AsÃ, aún cuando a las personas se les puede ofrecer una alternativa más conveniente a las ya conocidas, muchas de ellas continúan eligiendo una opción menos conveniente pero conocida, motivadas por el deseo de mantener las cosas como están. Las personas tienen una gran tendencia a enfocarse en evitar las pérdidas, aún cuando esto implique comprometerse en situaciones de riesgo. Según los economistas, las personas tienden a darle el doble de importancia a evitar las pérdidas que a adquirir ganancias, por lo que evitar las pérdidas es uno de los principales objetivos al tomar decisiones. Este sesgo explica por qué hay quienes prefieren gastar grandes sumas de dinero en seguros para asegurar lo que ya tienen, aún cuando lo que tienen termine costando menos de lo que gastan en los seguros. La preferencia temporal se refiere a privilegiar la situación actual respecto a la situación futura. Si bien es natural esta predilección, no es recomendable llevar esta tendencia al extremo. Situaciones en las cuales es común encontrar este sesgo es, por ejemplo, el poco ahorro que guardan las personas para su pensión en la vejez, los daños que se producen en el medio ambiente y, naturalmente, las pobres decisiones en salud que llevan a daños en el futuro, como lo son, particularmente, el fumar, beber y comer en exceso, lo que podrÃa conducir a, más adelante, desarrollar sobrepeso, obesidad, diabetes o cáncer, entre otros. En temas de salud, si bien las personas saben que su comportamiento es nocivo, lo continúan llevando a cabo, por lo que el problema básico es el autocontrol y la mejor solución es remover la tentación. Según la teorÃa económica tradicional, el proceso de decisión debiera ser consistente. Esto es, bajo las mismas circunstancias, las personas debieran tomar las mismas decisiones cada vez. No obstante, la evidencia ha demostrado que el verse sometido a tomar constantemente decisiones puede conducir a un estado de fatiga mental, en donde el cerebro se vuelve perezoso y hace un mal trabajo. Lo que hace que el tomador de decisiones sea propenso a tomar malas decisiones. Algunas investigaciones encontraron que las personas en situación de pobreza pueden ser más propensas a la fatiga de decisiones, porque muchas de sus decisiones son difÃciles, dado que incluso la decisión más pequeña puede tener implicaciones monetarias significativas. En un experimento conducido por Lengar y Lepper, se instaló un puesto de degustación de mermeladas en una tienda de comestibles. A las personas se les daba la opción de probar diferentes sabores de mermelada junto con un cupón de descuento al momento de pagar, si deseaban comprar un frasco. En un dÃa se exhibieron seis sabores, y en otro, 24 sabores. Los investigadores encontraron que el 30 por ciento de los clientes compraban mermelada cuando habÃa seis sabores para probar, pero solo el tres por ciento lo hacÃa cuando habÃa 24. Aparentemente, la cantidad de opciones abrumó a la gente. Este experimento, junto con otros, demuestra que tener una excesiva cantidad de opciones podrÃa tener consecuencias negativas en la inversión, especÃficamente, al inducir la desmotivación. A continuación, te invitamos a responder la siguiente pregunta. En resumen, si bien el concepto de "mercado perfectamente competitivo" es difÃcilmente aplicable en la realidad, sirve como una buena referencia para comparar mercados imperfectos de la vida real. Existen siete supuestos que posibilitan un mercado que sea perfectamente competitivo, y que se evalúen entre otros mercados para ver qué tan competitivos son. Se ha demostrado que la idea base de la teorÃa económica tradicional, que señalaba que las personas actúan siempre de modo racional, pocas veces se cumple. Las desviaciones del comportamiento racional representan patrones sistemáticos de sesgos cognitivos con enormes implicaciones para la salud y la atención médica.