[MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] Si comprendemos el valor de documentar lo realizado, es necesario tomar decisiones acerca de qué documentar. Así como cuando planificamos, pensamos las actividades que nos van a permitir que los estudiantes exploren el tema de estudio, también es necesario pensar y considerar cuáles son las actividades que queremos documentar. Por ejemplo, aquellas tareas que dan cuenta de los hitos del proyecto en términos del abordaje del problema o la pregunta inicial. ¿Cómo surgió el proyecto? ¿Cuál es su referencia curricular? Las acciones que propusimos para el abordaje de la pregunta o el problema, los tipos de agrupamiento en los que se organizaron los estudiantes, los recursos con los que trabajaron y las fuentes, referentes o instituciones que consultaron. Las intervenciones que realizamos y las que realizaron los estudiantes. Las preguntas, los comentarios y las reflexiones que fueron compartiendo y que los llevaron a tomar diferentes decisiones a lo largo del proyecto. Para documentar estos aspectos, entre otros tantos posibles, es necesario formular consignas específicas, diseñar instrumentos y/o llevar a cabo prácticas determinadas que tengan en cuenta esta finalidad. Por ejemplo, en el caso de la escuela de Baradero, trabajaron con recursos audiovisuales pero también se podría trabajar con recursos fotográficos o con producciones escritas de los estudiantes. En el caso que se observa en el curso encontramos diferentes modos de registro. En la conversación sobre la planificación la docente comparte la idea de armar un video para que las familias vean todo el proceso del proyecto. Para ello identifica qué momentos en particular le gustaría documentar. Por otro lado, en algunos fragmentos de las clases identificamos el registro de los alumnos en sus cuadernos, el armado de afiches con imágenes y palabras o conceptos claves para compartir con otro curso, el diseño de un juego y su uso en un recreo para compartir con alumnos de toda la escuela, entre otras cosas posibles. También es importante pensar y planificar las audiencias y los espacios en los que vamos a compartir la información, por ejemplo, ¿son registros para mí o para otros? ¿Cómo cambia lo que comunico cuando cambia el público a quien me dirijo? ¿Qué información selecciono en cada caso? Estas son algunas de las preguntas que ayudan a orientar esta tarea. En algunos casos se podrán diseñar páginas web, en otros, se arman carteleras, se organizan reuniones, se comparten mensajes via celular o publicaciones en alguna red social. En este sentido queremos resaltar que un rasgo distintivo del trabajo por proyectos es la interacción con el afuera, con una audiencia que va más allá del aula, que se vincula con el contexto y construye territorialidad. [MÚSICA]